La UNESCO eleva a la categoría de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad las técnicas artesanales del vidrio, reconociendo no solo su destreza técnica, sino también la profunda riqueza cultural que ha perdurado a lo largo de generaciones. Un legado vivo que conecta el presente con las ancestrales tradiciones.
La designación este miércoles seis de diciembre de 2023, es el resultado de la colaboración durante cinco años entre España, Alemania, República Checa, Finlandia, Francia y Hungría, representa un apoyo significativo a la preservación y promoción de tradiciones que han resistido el paso del tiempo. Más allá de las fronteras nacionales, este reconocimiento global destaca la importancia de salvaguardar las artes y conocimientos que han dado forma a las identidades culturales.
Este patrimonio inmaterial abarca diversas prácticas, desde la técnica de vidrio soplado con caña hasta la talla, el grabado, esmaltes y dorados. La inclusión en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad no solo aplaude la habilidad técnica, sino que también resalta la interconexión de estas prácticas con la historia y la cultura de diversas comunidades alrededor del mundo.
La declaración de la UNESCO brindará una plataforma global para la artesanía del vidrio, sensibilizando a ciudadanos de todas las latitudes sobre los valores inherentes al patrimonio cultural inmaterial. Este reconocimiento también desempeñará un papel fundamental en la distinción entre la producción artesanal del vidrio manual y la fabricación industrial, fomentando así una apreciación más profunda de las habilidades y dedicación requeridas en la producción artesanal.
En España, Vidrios Gordiola en Mallorca y la Real Fábrica de Cristales de La Granja en Segovia son guardianes de estas tradiciones. Más allá de la técnica en sí, la Real Fábrica de Cristales de La Granja destaca por realizar su artesanía en un edificio declarado Bien de Interés Cultural, convirtiéndose en un testimonio tangible de la historia.
La inclusión en la Lista Representativa también impulsa la documentación, enseñanza y salvaguarda de la producción de vidrio de forma artesanal. Facilitará la transferencia de conocimientos entre comunidades, creando puentes culturales que fortalecerán la herencia global de estas artes ancestrales.
En un mundo donde la producción industrial tiende a eclipsar las prácticas artesanales, este reconocimiento de la UNESCO actúa como faro, iluminando la importancia de preservar las tradiciones que han dado forma a la diversidad cultural. La inscripción en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad no solo es un título honorífico, sino un compromiso colectivo para proteger y transmitir estas artes del vidrio que, de otra manera, podrían desaparecer en el olvido. Este es un llamado a apreciar no solo el vidrio que se forma bajo las manos hábiles de los artesanos, sino la trama invisible de historias, conocimientos y valores que se entretejen en cada pieza, conectando el pasado, el presente y el futuro.
Grupo de trabajadores de la Real Fábrica de Cristales, La Granja, Segovia, España
Fábrica Gordiola en Mallorca