En el corazón de la República Checa, la pequeña localidad de Kunratice, en la región que llama “Valle de Cristal o Crystal Valle”, ha sido el escenario de un redescubrimiento asombroso. La Iglesia de Cristal, un monumento del siglo XIX, ha vuelto a brillar gracias al Ojo de Dios, una impresionante vidriera de dos metros de altura que estuvo oculta durante más de cincuenta años.
Esta vidriera elíptica, creada hace 150 años por el renombrado artista vidriero alemán Richard Schlein de Zittau, estaba decorada con motivos vegetales y un triángulo central con el Ojo de Dios rodeado de rayos de luz. Schlein, cuyos talleres estaban en Praga y Hrádek nad Nisou, es conocido por sus obras en decenas de edificios en las regiones de Liberec y Jablonec, pero esta vidriera es una de sus piezas más excepcionales.
La vidriera permaneció en la iglesia durante un siglo antes de desaparecer misteriosamente en la década de 1980. El año pasado, durante reparaciones de emergencia, los trabajadores de la construcción descubrieron la vidriera original oculta detrás del altar. El sacerdote Rudolf Repka sugiere que el clérigo local podría haberla escondido para protegerla de la vandalización durante el régimen comunista, que destruyó muchos relicarios religiosos.
A pesar de los esfuerzos por preservarla, la vidriera original sufrió daños y no pudo ser restaurada completamente. Ahora se exhibe en una vitrina iluminada en la nave principal de la iglesia. Además, se encargó una réplica fiel para ser colocada en su lugar original sobre el altar. Zdenek Kudlácek, propietario del taller de vidrieras de Nový Bor, lideró el equipo de ocho maestros vidrieros que trabajaron en la réplica. “Es una pintura sobre vidrio, lisa por un lado y estructurada por el otro. La pintura se cuece a 550 °C en un horno, quedando incrustada en el vidrio. La composición completa está formada por varias piezas sostenidas por un marco de estaño”, explica Kudlácek.
David Sobotka, administrador de la iglesia, destaca que la restauración de la iglesia durante la pandemia de COVID-19 transformó el templo en una galería artística única que atrae a miles de visitantes cada año. Las donaciones han permitido recaudar más de 600.000 coronas para reparaciones adicionales, como la de la torre.
Además de la vidriera, otro hallazgo significativo fue la tumba de Dios decorada con gemas de vidrios de colores, encontrada en 2021 debajo de las escaleras del pórtico de la iglesia. Esta tumba de 150 años de antigüedad, encargada por los feligreses alemanes y elaborada por la empresa Zbitek and Sons de Olomouc, es una de las mejor conservadas en la República Checa.
El descubrimiento de la vidriera coincidió con nuestra visita al taller del maestro vidriero Jirí Pacinek, situado justo enfrente de la iglesia. Este taller, conocido por sus extraordinarias creaciones en vidrio, ha jugado un papel crucial en la revitalización del templo. Fue en este día especial, durante nuestra visita, cuando el vitral oculto fue finalmente revelado, añadiendo un capítulo emocionante a nuestro viaje a Crystal Valley en agosto de 2023.
El Templo de Cristal en Kunratice es un testimonio del poder del arte, la historia y la comunidad. Gracias a la dedicación de los locales y la colaboración con maestros vidrieros, este templo no solo ha recuperado su antigua gloria, sino que también se ha convertido en un faro de esperanza y belleza para todos sus visitantes.
