Renata Schirm, una destacada artista del vidrio nacida en Hungría y radicada en Finlandia, ha dedicado más de 15 años a la exploración y manipulación de un material tan fascinante como el vidrio. Desde su graduación en la Universidad de Aalto en 2010, Renata ha desarrollado una carrera artística marcada por la innovación y la introspección, lo que la llevó a recibir el prestigioso Premio Ornamo en 2018. Su trabajo, a menudo descrito como una profunda meditación sobre la relación entre el cuerpo, el movimiento y el vidrio, la ha consolidado como una figura clave en la escena artística contemporánea.
La Fascinación por el Vidrio: Una Danza de Movimiento y Luz
El interés de Renata por el vidrio comenzó con su naturaleza fluida, un estado que, según ella, “la llevó a reflexionar sobre la esencia del material de una manera más profunda”. Inicialmente, sus exploraciones se centraron en las formas que el vidrio adopta de manera natural, moldeado por el movimiento. Este enfoque la condujo a ver sus obras de vidrio como documentos vivos, capturando la sustancia única de su cuerpo en un momento y lugar específicos.
Con el tiempo, su enfoque ha evolucionado hacia un interés más amplio en las propiedades ópticas del vidrio. La capacidad del vidrio para interactuar con la luz, volviéndose visible o invisible dependiendo del ángulo y la iluminación, se ha convertido en un tema central en su obra. Para Renata, “el movimiento es esencial para observar el vidrio sólido”, una afirmación que refleja su continuo interés en cómo la percepción del espectador puede cambiar la apariencia de sus piezas.
Creación y Diseño: El Vidrio Como Pintura Reflectante
Actualmente, Renata trabaja con piezas que ella describe como “pinturas reflectantes”, aunque el público a menudo las identifica como tapices de rya debido a su estructura. Sin embargo, la intención de Renata no es crear una declaración sobre la tradición de los textiles rya, sino más bien explorar la naturaleza del vidrio como material. Estas obras, que a menudo se asemejan a paisajes abstractos, cambian de apariencia según las condiciones de luz, creando una superficie viva que interactúa con el entorno y el movimiento del espectador.
Para ella, el vidrio es un material auténtico y natural, aunque paradójicamente es completamente sintético y creado por el hombre. Esta dualidad la lleva a cuestionar las categorías tradicionales de los materiales y a reflexionar sobre la autenticidad en el arte y la artesanía contemporánea.
Cuando se le pregunta sobre su obra favorita, admite que siempre está mirando hacia adelante, buscando la próxima creación. “Probablemente mi obra favorita sea la próxima”, dice, reflejando su mentalidad orientada al futuro. Aunque reconoce que algunos de sus trabajos son hitos importantes en su carrera, confiesa que rara vez está completamente satisfecha con sus piezas, siempre consciente de las imperfecciones y las ideas no realizadas.
Principios de Producción: Honestidad y Equilibrio
En cuanto a sus principios de producción, la artista enfatiza la importancia de la honestidad. Considera que es más fácil ser honesta cuando se trabaja partiendo de un material, en lugar de basarse únicamente en teorías. Su proceso artístico, describe, es como una limpieza, donde intenta eliminar todo lo que impide que la idea principal cobre vida. Para ella, el equilibrio en su trabajo es algo difícil de describir con palabras, y aunque reconoce la importancia de la producción ecológica, su enfoque se centra más en escuchar y comprender sus sentimientos durante el proceso creativo.
Renata Schirm es una artista que no solo moldea vidrio, sino también ideas y percepciones. Su trabajo continúa desafiando las fronteras entre lo natural y lo sintético, lo visible y lo invisible, invitando al espectador a una experiencia de descubrimiento continuo a través del movimiento y la luz.
Sitio web: https://renataschirm.fi/
Instagram: @schirmrenata
