El pasado mes de Junio se llevó adelante el Congreso Iberoamericano Mujeres en el Vidrio, allí se presentaron numerosas artistas del vidrio. En esta ocasión descubriremos la obra de la vitralista Silvina Russo.
El pasado junio se celebró el Año Internacional del Vidrio y el 25º aniversario de la fundación del Museo de Arte en Vidrio en Alcorcón de una manera muy especial, con el Congreso Iberoamericano en torno a las Mujeres en el Vidrio, Artistas y Científicas.
El objetivo principal del encuentro fue crear nuevos vínculos y reforzar existentes entre las profesionales del mundo del vidrio. Arte y ciencia se unieron para conmemorar el universo del vidrio.
Entre las artistas participantes, se encuentra Silvina Russo. La vitralista nació en Bahía Blanca, Provincia de Buenos Aries el 30 de mayo de 1968. Desde su niñez estuvo relacionada al mundo del Arte, comenzando sus estudios a los 6 años en la Academia de Dibujo y Pintura Conte Grand, de la ciudad de Bahía Blanca. Al radicarse en Neuquén con su familia en el año 1975 asiste a la Escuela Superior de Bellas Artes formadora integral para entonces de varias disciplinas artísticas como Dibujo y Pintura, Teatro, Música y Danzas. En el año 2000 se radicó en Venezuela, ciudad de Maturín adonde asistió al taller de la Artista Plástica y Vitralista Pitty Cartea con quien se especializó en el diseño y realización de vitraux Tiffanny y diferentes técnicas del vidrio hasta el año 2004. En el año 2005 y de regreso a su país, abre su taller de Arte en vidrio en la ciudad de Neuquén y prosigue su formación en Dibujo y Pintura hasta el 2010. Se traslada a la ciudad de San Carlos de Bariloche, adonde asiste al Atelier -Taller libre de Arte del Artista Plástico Claudio Alek Pascual durante los años 2012-2013-2014-2015.
Acerca de su obra Silvina comenta:
«Como artista patagónica me despierta curiosidad indagar sobre lo que nos define como mujeres de este lugar al que pertenecemos y amamos, la Patagonia Argentina.
Un lugar habitado por pueblos originarios, inmigrantes aventurados y criollos lugareños, si acaso su mixtura compone nuestra esencia me invita a reflexionar. No puedo ignorar que la historia cuenta que en estas tierras habitamos mujeres que provenimos de estas agrupaciones, los llamados NIC (nacidos y criados) y a los que nombran como VIQ (venidos y quedados).
En mi búsqueda personal recorro mi pasado ancestral y puedo recrear el modo con que las mujeres de mi linaje fueron armando sus vidas entre montañas, lagos y mar, estepa, nieve, vientos, la crudeza de su clima, la majestuosidad de la naturaleza y la templanza de su sabiduría.
Me inspira pensar e imaginar lo que vieron sus ojos, lo que anhelaban, soñaban y no realizaban, sufrían y callaban, amaban, disfrutaban y celebraban.
Como se moldeaban a medida que pasaba el tiempo y las generaciones hasta llegar a este presente de cambio y deconstrucción, de enarbolar derechos y generar participación.
Allí encuentro la idea para transformarla en obra, unirla a la pasión de trabajar con un noble material como el vidrio y así crear esta serie de figuras que combinadas con metal les presento en este video para mostrar esta búsqueda artística y personal.»
